La ley eterna

Farsante, fantoche,
fantasma, confiesa!

Las letras caerán, alguien las borrará o se convertirán en polvo, al igual que tú, al igual que todos! Se hará tu voluntad. Lo que quieras, lo que siempre has querido.  La luz concentrada es más brillante, pero, la verdad llenará de luz aún en negrura.  Nunca te busques fuera de ti.

Cada que reces tus acciones, no las contemples correctas o incorrectas, sólo diferentes, no perturbes con tus juicios hacia ti mismo y menos hacia los demás, hay una ley, una certeza, todo te será devuelto, aquí y ahora, y no es promesa; en debilidad o en verdad serás sumergido por decisión propia, crearás tu propio paraíso o tu propio infierno.  Quieras o no, "No hay destino", "Hay albedrío",  "Vas por él". Quieras o no, puedes llegar a descubrir el hades más profundo, el más siniestro, de lucha interna, ya que la culpa te devora, habita en tu mente, pues ella, tu mente, es tu peor enemiga,  conoce tus pecados, tus aciertos, a ti, será tu juez y tu verdugo;  en cada conducta maligna, de destrucción, te hundirás ahí mismo, es un castigo personal; aquí la ley se cumple, no hay condena, "A cada acción, una reacción", es una ley eterna, no hallarás otra sentencia, no será imperiosa la furia de el Alfa y el Omega, la condena es íntima. Si piensas, eres.

Roza tu existencia, besa el universo, abraza las palabras presente y las idas, nunca las pierdas, al igual que no dejes perder, ni desaparecer las ofensas, los te odio o todos los "Te Amo", ya que son sentimientos, y tú fuiste capaz de crearlos, fuiste capaz de existir para tantos otros y hacerles sentir tantas emociones, sin importar si fue con calidez o de manera gélida, lo notable es que hiciste vibrar sus corazones, no te perderán de su memoria, en deleite o en tortura.  Aquí, también se cumple la ley eterna, será tu propio deleite o tu propia tortura, tú la concebiste, te pertenece.

La vida sí tiene sentido, el que cada ser le dé! Y de no tenerlo, es que esa alma nunca fue, sólo pasó sin vida en su sendero, como una alma en pena, una alma muerta en vida!, por esa infeliz alma en sombras y bruma, que no saboreó la fortuna de la vida, sentir pena. Cada día se muere, aunque te creas perpetuo.  Lo que se te ha dado, te será quitado.

Abraza la vida, deja tu huella en cada acto, en cada suspiro, vivirás eternamente, hallarán tu existencia en cada creación del universo. Vive con intensidad, con amor, hastiado de felicidad, sé loco, sé fuerte y, aún caído, sé tu mismo.  Pero, sobre todo, Ama, en mayúscula, en delirio. Entrega todo, sin miedo, en libertad.  Ámate a ti mismo hasta que no puedas más por que aunque algún día ya no exista nada, sólo vacío y oscuridad, nunca dejaremos de ser polvo y seamos, pues, polvo, pero seamos: "¡Partículas de cariño, átomos de pasión!".